Las feministas tienen razón

Yo pensaba hacer un agudo comentario plagado de sutilezas y dobles sentidos sobre esta noticia:

Ayer varias mujeres adscritas al Partido Socialista convocaron a los medios de comunicación a una ruedita de prensa. El tema era entrar en una vertiginosa filigrana cósmica: denunciar que las instituciones canarias (o sea, CC) por un lado intentan luchar contra la violencia de género, pero luego destinan dinero a financiar tinglados como el festival Reggaetunning 2004 (en fin) y, no se lo pierdan, el festival Santa Blus (tal que así estaba escrito en el comunicado) 2006 con la siguiente cita, prepárense: "El concierto de apertura lo realizará Ike Turner, que debe su fama mundial no a sus dotes de músico, sino por ser reconocido socialmente como el ex marido maltratador de Tina Turner".
(...) parece que se documentaron exclusivamente con la película Tina, con la versión de la cantante. Luego está el Google, el preocuparse un poco para comprobar que sobre Ike no pesa ni una sola denuncia por maltrato, que siempre negó haberle puesto la mano encima a Tina, aunque sí reconoció una época nefasta en los setenta por las drogas, problema por el que sí que visitó cárcel. (...) Link aquí

Quería hablar de la presunción de inocencia, de que grandes artistas pueden ser unos miserables en su vida privada (Tom Jones que fue acusado de maltrato, Woody que se lió con su hijastra, John Wayne que era racista y de extrema derecha, Sinatra que colaboraba con la mafia) del toque racista que creo que impregna las críticas al reggeton (si fueran rubitos no mejoraría la música pero los criticarían menos). De que las críticas a la pornografía me recuerdan peligrosamente a los curillas de mi antiguo colegio. Pero soy un HOMBRE y mi cerebro no da para más, soy insensible y descuido la higiene del hogar, en caso de divorcio rechazaría la custodia de mis hijos y si me acusaran de maltrato no harían falta más pruebas. Por eso mi minúsculo cerebro masculino solo tiene sitio para esto:


GOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOL

Vespinoza