sábado, enero 31, 2009

Seguro que más de una vez has vuelto a casa sin chaqueta después de una noche de fiesta.

Amigo, no pienses que ha sido efecto del alcohol, (a pesar de su poder desaparecedor de objetos y neuronas), hemos descubierto al verdadero terror del mundo chaqueteril en la ciudad de la Laguna: ¡La vieja comeabrigos!


Deprofundis que cada dos meses sacrifica una chaqueta...

2 comentarios:

El Enanito dijo...

y qué obtienes a cambio?

Locke dijo...

Una resaca, creo