
Mieditorrrr. Mucho mieditorrrr.
Idea original de Dionígenes para el Rincón de Ninguno
Un cajón de madera virtual al que se suben tres tipos (por turno riguroso, pero que a veces se echan a empujones por falta de espacio) y una becaria (que intenta subirse, pero no la dejan) para arengar, criticar y sermonear a los incautos que acierten a pasar por aquí sobre todo aquello que les molesta (o no).
Son excepcionales los casos en los que la clase política, en su totalidad, la prensa, en su totalidad y la opinión pública se ponen de acuerdo de una misma cosa. Es tan raro, que asusta, y con razón.
Para los que no estén al tanto, Cho Vito es una muy pequeño conjunto de viviendas en el litoral del municipio de Candelaria, en Tenerife. La semana pasada se procedió a la demolición de 23 de estas viviendas, a tenor de la ley de costas, drama que provocó el seguimiento de medios nacionales, y masivamente, regionales.
Desde niño me llevan diciendo que las verdades a medias son peor que las mentiras. Así pues, voy a contar algunas verdades sobre el caso Cho Vito que no se han contado, o si se han hecho se han hecho tan tímidamente y a destiempo, que, para el caso, es lo mismo que si no se hubieran contado.
¿Los motivos de que no se hayan contado? Los desconozco. No sé si es para que la noticia vendiese más (misión cumplida), por miedo a la impopularidad por parte de la prensa (que vergonzoso sería esto), o simplemente porque ya no quedan periodistas de verdad. No sé cual de las opciones es más descorazonadora.
Empiezo.
Las viviendas eran ilegales. Se construyeron sin titularidad sobre el terreno, es decir, “aquí me hago mi casa, porque me da la gana”, y por supuesto sin ningún tipo de licencia o permiso.
Esto se ha dicho en medios, pero muy sutilmente, tanto que la impresión que se ha dado es que la actuación consistió en el cruel derribo de las propiedades una personas sin ningún tipo de piedad, y en total indefensión.
Los afectados hacía años que conocían a la perfección la situación, y por supuesto habían hecho todo lo posible por evadir el cumplimiento de la ley. Incluyendo el muy viejo truco (aconsejado con toda seguridad por sus abogados) de esconderse. Es decir, evitar de todas las formas posibles que la recepción de las notificaciones legales, para posteriormente argumentar que en ningún momento se les notificó nada.
Esto se ha obviado bastante en medios, dado que las imágenes que repetían una y otra vez mostraban frases de los afectados como: “no me han dejado ni entrar a por mis cosas”. Hacía años que estaban en aviso de que dichas construcciones ilegales iban a ser derribadas y habían sido perfectamente notificados de que el martes iba a ser el día.
Se ejecutó el derribo de 23 viviendas. Pero una cosa que a penas se insinuó es que hubo algunas viviendas que no entraban en el derribo. Vaya, parece que a alguien se le olvidó comentar este pequeño detalle.
¿Y por qué algunas no entraban en el derribo? Pues porque se derribaron solo las casas de aquellos que ya disponían de, al menos, otra vivienda, y por tanto, para los que su casita en la playa suponía su segunda residencia (incluso para algunos hasta tercera, si no estoy mal informado) ¿Pobres? Vaya.
A los habitantes de las viviendas que no fueron derribadas, por no tener otro lugar, se les va a proporcionar una vivienda de protección oficial. Por ello que se les permite seguir viviendo en Cho Vito, hasta que eso ocurra. Según tengo entendido, la VPO se les va a proporcionar sin coste. Aunque, corríjanme si estoy equivocado este último punto. En todo caso van a poder acceder a una vivienda.
Es decir. La premisa es que nadie se va a quedar en la calle. Todo lo contrario de lo que han querido vendernos.
Por otro lado, menudo precedente, yo me hago una casa donde me da la gana, y cuando me la derriban me dan una nueva ¿Moraleja?
Por supuesto estoy totalmente de acuerdo a que se facilite acceso a una vivienda a aquellos que necesitándola, no pueden acceder a tener una de ninguna manera.
Siendo segundas residencias, ¿qué uso hacían de las mismas?
Para algunos era la casita de veraneo o de fines de semana, donde hacerse las paellas, a gustote, en primera línea de mar. En la misma orilla.
Para otros era simplemente una fuente de ingresos adicional, pues muchas de las viviendas estaban arrendadas. Dándose el caso de que uno de los afectados tenía hasta tres de estas viviendas arrendadas.
Se acabó el negocio.
Desconozco qué ha pasado y en que siuación estaban los arrendadores de las viviendas. Supongo que son realmente los principalmente afectados.
Muchos han argumentado que Cho Vito era un arraigado pueblo de pescadores. En algunos medios incluso se llegó a comparar con otros emplazamientos, realmente arraigados y de pescadores, con más de 100 años de antigüedad.
De arraigado nada.
Aconsejados seguramente por sus abogados, intentaron declarar Cho Vito como BIC (Bien de Interés Cultural) con el único objetivo de evitar el derribo, pero la entidad encargada de conceder dicha calificación, el Cabildo de Tenerife, la desestimó ¿Y por qué lo hizo? Porque no era, de ninguna manera, un Bien de Interés Cultural, era un conjunto de viviendas a la orilla del mar, alguna con cierta antigüedad, pero la mayoría no. Sin más.
De pescadores nada.
Sí. Es cierto que algunos de los habitantes de Cho Vito pescan. Efectivamente, y por lo que me he enterado sin permisos, ni licencia de ningún tipo.
Vaya.
Si en su momento me construí una casita en la orilla del mar, de la cual disfruto cuando quiero (o bien me aporta unos beneficios extra), y ahora me la van a quitar, me cabreo. Lógico, ¿Verdad?
¿No haría la mayoría casi cualquier cosa por intentar evitarlo?
El único argumento comprensible de todas las quejas es el agravio ¿Y por qué Cho Vito? ¿Por qué no algunas casas de ricos u hoteles que están también en la costa?
Desde luego, mi deseo, y debería ser el de todos, es que se recupere la costa. Y espero que, por supuesto, caigan todas las casas y construcciones, de ricos y no ricos, que estropean el litoral.
Y bueno, en proceso están otras tantas construcciones en toda españa, hoteles de lujo incluídos. Supongo que todo se andará, y si no se anda, habrá que darle un empujón, pero eso no significa que los Cho Vitos que hay esparcidos por el territorio no haya que tirarlos de igual forma, ya sea hoy, mañana o el año que viene.
Por otro lado, si toda la energía invertida en manifestaciones pro Cho Vito, con insultos y amenazas de muerte al alcalde de Candelaria, a su familia y a todo el que se meneara por ahí, incluidas. Si toda esa energía, repito, se invirtiese en denunciar aquellas construcciones que, estando también en el mar, parece que todavía no están señaladas, otro gallo nos cantaría.
Así pues, todo esto ha sido una farsa. Una farsa en la cual han caído absolutamente todos. No hay medio, televisión, radio o prensa escrita, que no se haya lamentado de la injusticia, y que no haya hecho incapié en el drama, sin haber indagado lo más mínimo, tan solo transmitiendo lo que los afectados contaban ¿Eso es periodismo?
Un farsa en la cual se han sucedido una serie de declaraciones políticas, a cual más vergonzante y a cual más absurda.
Para todos la culpa ha sido de costas. Para todos costas es malísimo. Es el ogro que se dedica a dejar en la calle a pobres ciudadanos de forma cruel, de forma totalmente arbitraria. Por supuesto para los interesados, en búsqueda del voto perdido, costas es Madrid, y Madrid es mala con los Canarios (Habla, canario, habla. Pero ni se te ocurra pensar)
En definitiva. Se ha defendido a capa y espada el interés de unos particulares que lo que hicieron en su momento fue quebrantar la ley. Pero lo peor es que, en todo este circo mediático, se ha demonizado al unísono el objetivo de recuperar el litoral español.
Eso sí me parece un drama.
Vespinoza desmoralizado(...)Justo cuando comenzó esta jornada sagrada, Jamal fue a recoger a su hija de casa de su prometido en un barrio de Acre. Y fue en coche. Su osadía despertó las iras de los judíos más radicales de la ciudad, quienes, a su vez, encendieron los ánimos de sus vecinos palestinos, prendiendo la mecha para cinco días de violencia.
El caso ha ido tan lejos que incluso Jamal ha tenido que comparecer -lo hizo el domingo- ante el comité de Interior de la Knesset, el Parlamento israelí. Asegura que no tenía intención de provocar ningún incidente. Si yo soy el que ha causado esto [los disturbios] estoy dispuesto a sacrificar mi cuello aquí mismo, en esta mesa, en la horca, para devolver la paz y la tranquilidad a la ciudad de Acre, para devolver la convivencia a su lugar". Destacó que él mismo fue fundador de una asociación que lucha por la convivencia pacífica entre israelíes y palestinos en Acre. "Han intentado hacere parecer un asesino, me han convertido en un fascista".
Pero ojalá fuera sólo el IGIC. Si fuera sólo eso, a nadie le molestaría. Te traes un producto de 100 Euros, pagas 5 de IGIC. Como si lo compraras aquí. El problema es que para liquidar ese IGIC tienes que recurrir a un agente de aduanas. Un agente de aduanas es el señor que rellena un papel llamado DUA (documento único aduanero) en el que se refleja de dónde viene la mercancía, en qué vuelo/barco vino, qué contiene (siguiendo una tabla fija con categorías de productos) y cual es el valor de la factura, o si no la tuviera por no ser mercancía comercial, cual es su valor estadístico (por indicios o precio medio de mercado, también siguiendo unas tablas).
Tanto quejarse de la ultraperifería y la ostia en bote y luego somos nosotros los que grabamos con esta clase de impuestos
Cuando digo que un agente de aduanas rellena el papel, es en sentido figurado. Un agente de aduanas rellena un papel de la misma manera que un notario te redacta unas escrituras de compraventa (lease: lo hace un empleado con un ordenador, usando un programa, dos pulsaciones de tecla y un formulario preimpreso que se rellena en una impresora matricial). El agente de aduanas no se tiene ni que molestar en firmar el documento, que ya le dispensa el Gobierno de Canarias por ello.
¿Cuanto cobra el agente de aduanas? Entre 18 y 50 euros. Eso comprende honorarios. Pero a veces también conceptos despiporrantes como fotocopias, desplazamientos y llamadas de teléfono.
Pero esperen, que aún hay más: Procura no traer mercancía que caiga dentro de la lista del AIEM (Atributo sobre la Imposición y Entrega de Mercancías) porque entonces, además del IGIC, te toca pagar un recargo por ser anti canario e insolidario con la industria local. El recargo suele rondar un 15% del valor de la mercancía."
Adjunto: lista del AIEM
Adjunto también: lo que se denomina "las cuatro libertades de la UE" :