Inefable Meléndez

Pues si señores, volvemos sobre EL TEMA.

Pensaba tomarme un descanso de todo esto hasta pasar la reasaca del funeral de Javier porque, sinceramente, estoy hasta las meninges de tanta tontería. A partir de ahora me limitaré a comentar las novedades relevantes y punto. Pero, como no podía ser menos, ya hay novedades.

Aparece hoy en la portada de "El Día" en su edición digital que Meléndez ha patentado uno de sus factores en EEUU. Pinchando en el enlace se lee algo sutilmente distinto "La oficina de patentes de EEUU asegura los derechos de Meléndez sobre la glicina". ¿Hay diferencia? Mucha. Toda.

Enrique Melendez cursó en Agosto del año pasado su solicitud de patente (no patente de aplicación, patente y punto. Pero ya volveremos sobre ese tema) y desde entonces, su presunto descubrimiento está a salvo de ser robado por una malvada multinacional. Meléndez dispone de la exclusiva para el negocio de la glicina hasta que la patente solicitada sea aceptada o rechazada, es como una patente provisional que te protege mientras haces los trámites. Por ese motivo le decíamos, y le seguimos diciendo, que no hay motivo para tanto secretismo. Que nos enseñe de una vez esos teoremas matemáticos que demuestran que las papas son venenosas.

Nada más leer el artículo me fuí a la página de la Oficina americana de patentes , USPTO, que tan a menudo he visitado durante los últimos dos años, y busqué Melendez en la base de datos de patentes concedidas (Issued patents, a la izquierda). La página me devolvió 235 resultados --parece que Meléndez ha estado ocupado-- pero ninguno era el que buscaba. Eso sí, encontré unos patines con sandalias patentados por Ricardo Melendez ¿Un antepasado ilustre?. Pero entonces recordé la famosa frase: "Hemos pedido una patente de aplicación..." y me fuí a la base de datos de solicitudes publicadas(Published Applications) y allí estaba.

Melendez ha presentado una solicitud de patente (patent application) y esta ha sido publicada mientras se tramita. Releyendo el artículo de "El Dia" veo que efectivamente, dan a entender que lo ha patentado, pero no lo dicen. Así pues, "El Día" nunca miente. Seguro que hay algo de verdad en lo del sanedrín de Vegueta, de hecho, vegueta existe.

Por supuesto, el diario más tinerfeño de los diarios tinerfeños no explica que incluso si le fuera concedida la patente en EEUU (En europa no se puede patentar este tipo de cosas), no podría vender el producto sin autorización de la FDA. La patente le daría la exclusiva comercial, no le autorizaría la venta.

Demóstoles

PS: En una escueta nota de prensa, el Valhalla comunica que se han terminado sus reservas de Jabalí asado y Cerveza. Se ruega a las funerarias que entierren a sus clientes con una fiambrera que contenga bocata y zumito para que aguanten hasta restablecer las existencias.